AROMATERAPIA
La Aromaterapia es una disciplina milenaria basada en la utilización de Aceites Esenciales Puros, provenientes de plantas aromáticas con valiosas propiedades. Su uso habitual, brinda bienestar físico, mental y emocional.
Al acercarnos una flor a la nariz o al pasar cerca de una planta, cientos de partículas suspendidas en el aire estimulan nuestro olfato para que percibamos su aroma.
Esas partículas, presentes en las plantas, se denominan aceites esenciales y, en ellos, se concentran todas las propiedades de las plantas.
Los aceites esenciales provienen únicamente de origen natural y son las propiedades de las plantas las que sanan y no su aroma. Esta es la principal diferencia entre Aromaterapia y Aromacología.
Usos de la Aromaterapia
La Aromaterapia actúa a través de dos vías: la inhalación y el contacto con la piel. Es por eso que existen cientos de formas de uso de los aceites esenciales.
Tené en cuenta que, a excepción de algunos aceites, deberás utilizarlos previamente con un aceite vehicular, como el de almendras, o con una emulsión.
En baño y masajes
Colocá de 1 a 5 gotas del aceite esencial que prefieras en una tapita de aceite vehicular de Almendras, mezclalos y listo! Ya tenés tu aceite perfumado para utilizar en un suave masaje o sobre la piel húmeda luego de la ducha.
También podés utilizarlo en un baño de inmersión relajante para un momento de calma y placer.
Los aceites de Palmarosa, Geranio y Nerolí son ideales para esto.
Para contracturas
Si aparecen contracturas o molestias en el cuello, los aceites esenciales pueden ayudarte a aliviarlas.
Colocá de 1 a 5 gotas de aceite esencial Lavanda, Romero o Enebro en una tapita de aceite vehicular de Almendras, y realizá un suave masaje en la zona indicada.
Como sales de baño
Solos o combinados, los aceites de Lavanda, Nerolí, Geranio y Palmarosa son perfectos para realizar sales de baño.
En una taza de té colocá sal gruesa o sal marina y agregá de 1 a 5 gotas de aceite esencial. Mezclá suavemente y verté la preparación en la bañera.
Podés prepararlas con anticipación y tenerlas guardadas hasta el momento de su utilización.
Para el cabello
Los aceites esenciales puros son ideales para embellecer y cuidar el cabello.
Colocá de 1 a 3 gotas de aceite esencial puro de Ylang Ylang, Palmarosa o Geranio en la palma de la mano, y masajeá suavemente largos y puntas del cabello. Le darán suavidad y perfume.
Mezclá cualquiera de ellos con aceite de Almendras y tendrás tus puntas selladas!
El aceite esencial de Romero es un gran fortalecedor del cabello debilitado. Colocá 20 gotas en 200 ml de tu shampoo habitual y lográ un cabello fuerte y saludable.
Realizá el mismo procedimiento con el aceite esencial de Tea Tree para mejorar los síntomas del cuero cabelludo graso.
En cosmética
Potenciá tu emulsión facial y corporal mezclando el producto con 1 gota de aceite esencial puro.
El aceite esencial de Palmarosa es ideal para pieles secas y los de Geranio y Tea Tree para pieles grasas.
No utilices aceites cítricos ya que son fotosensibles y pueden manchar la piel.
En la almohada
Utilizá los aceites esenciales puros de Lavanda, Palmarosa, Geranio o Nerolí en la almohada al momento del descanso.
Prepará 2 ó 3 discos/pompones de algodón con 1 gota de aceite esencial cada uno y colocalos entre la funda y la almohada.
En inhalaciones y vapor
Para aliviar síntomas de congestión, gripes y resfríos, colocá 1 gota de aceite esencial de Eucalipto en el paquete de los pañuelos descartables y llevalos siempre con vos.
También podés optar por verter de 1 a 5 gotas del mismo aceite esencial en un cuenco de agua hirviendo e inhalar el vapor cubriendo la cabeza con una toalla.
Si tenés piel grasa, realizá el mismo procedimiento con aceite esencial de Tea Tree o Geranio. El vapor abre los poros y los aceites permiten equilibrar el exceso de sebo.
Hornillos
Otro de los usos habituales, es el hornillo.
Verté de 1 a 5 gotas en el cuenco del hornillo, completá con agua tibia o natural y colocá la velita de noche. Es el vehículo ideal para acompañarte en los momentos de trabajo y estudio.
Los aceites esenciales de Limón y Menta ayudan a crear una atmósfera de concentración.
El de Eucalipto es ideal para purificar los espacios cuando hay personas con resfríos y así prevenir posibles contagios.
Llevalos en ánforas y accesorios
Otra manera muy sencilla y práctica de llevar los aromas en todo momento es perfumar accesorios como un ánfora.
Basta una gota en el ánfora para que te acompañe todo el día. Del mismo modo pueden perfumarse pulseras de hilo o algodón, cintas en la muñeca, pañuelos, etc.
Todos los aceites esenciales puros se pueden utilizar con este método, dependiendo del tipo de bienestar que quieras lograr.
Sólo tené precaución con los aceites esenciales de cítricos que pueden manchar.
Clasificación de los Aceites Esenciales
Los Aceites Esenciales pueden clasificarse en tres grupos principales:
SANADORES
Los que vienen al rescate frente a congestiones, molestias, dolores y más!
- LAVANDA
- EUCALIPTO
- TEA TREE
- ENEBRO
ENERGIZANTES
Ideales para recuperar la vitalidad, salir y moverse.
- LIMÓN
- NARANJA
- ROMERO
- MENTA
- ENEBRO
ARMONIZANTES
Permiten encontrar la calma, dormir, serenarse y descansar.
- LAVANDA
- PALMAROSA
- GERANIO
- NEROLÍ
- YLANG YLANG
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